[ ...y dice, dice, dice...]

Después de mucho tiempo veo mi blog, uno no público por cierto. Quisiera tener la valentía de mostrar lo que escribo, soy muy simple al hacerlo, carezco de estilo y lo que es peor, padezco del síndrome agudo de : Depresión literaria. Sólo busco expresarme y lo consigo con claridad cuando paso por momentos difíciles. Creo que, el escribir, se me da cuando estoy sumergida en tensas circunstancias, como hoy.

Estoy confundida? quizá. Tengo 22 años y desde que recuerdo intento ser diferente, intento derrotar esa gran barrera que separa a los hombres de la realidad, intento ser sincera. He conseguido muchas "paltas" de esa forma, he ganado anticuerpos con algunos, pero nunca he perdido un amigo por serlo, he ganado, yo diría.

Hoy, por la tarde, en el trabajo he entrado al messenger - obviamente no lo sabe el gerente, no quiero sanciones. Sin embargo, si me lo pregunta, con las sinceridad que me caracteriza, le diré que sí - Pero shhht!!!, esto no lo debe saber nadie (aunque algunos muy "sapos" me han descubierto, pero no dirán nada). Está prohibido conectarse al msn. En fin, me conecté y después de haber charlado con - después lo contaré - Se conectó "él" - "él, para ser breve, de hoy en adelante será definido como "el cobarde más terriblemente encantador que pude haber conocido" o "un tonto del culo", como dignamente decidió llamarse ante mi - canceló nuestro encuentro de la semana posterior a ésta. Renegué. "El tonto del culo" ha hecho esto 3 veces. No, no me juzguen. Lo mandé al "carajo" en silencio, por enésima vez.

Pasado lo que ya conté, decidí olvidar por completo lo sucedido y continué con lo mío - no dejo que me perturben cosas de esa clase, al menos no en los últimos meses . Mejor lo olvido y me callo, tomé las cosas "light".

Al llegar la noche, lo que menos quería es pasarla mal. No por lo sucedido con el "Tonto del culo", sino porque, últimamente, mis padres y yo discrepamos demasiado. Discutía con mamá, en la calle, con un tono moderado, pero discutía. Como siempre, ella intenta perder los papeles para demostrar fuerza y, mientras esto sucedía, "él" llamó. Mal momento. Mamá se quejaba, discutía, y yo sólo veía mover sus labios. Sólo pensaba en que..."Qué diablos quiere, ahora me timbras, para qué?, para joder?...la dejé caminando sola, tomé otro camino.

Lo llamé, no contestaba, como de costumbre. Contestó y lo escucho decir: "Hola, pensé que no querías hablar conmigo? - pero sí que le haces honor a tu sobrenombre "Tonto del culo", pensé - ¿Para qué me llamas?, le dije. La indignación fue tanta.

Se fue de viaje, con unos amigos, dice. No quiero pensar si eso es cierto, no tengo por qué enojarme, él no es nada mío. Lo fue. Podría estar en este momento, con su última noviecita, su actual "ex", porque si tengo que definirme de alguna manera yo soy su "vieja ex", una a la que él dice no olvidar, una a la que él dice aún..., bueno, él dice, y dice y dice.

Consigue mantenerme en vilo, consigue hacerme escribir, consigue darme letra. Mañana es otro día. Se sincero, se diferente.